Es importante asumir que puede existir una diferencia substancial entre la realidad que perciben los ciudadanos sobre el entorno socio-económico que les rodea y la realidad objetiva.
Estas diferencias esenciales entre la realidad percibida y la auténtica realidad viene determinada por la información que posee el ciudadano y cuya fuente fundamental son los medios de comunicación de masas a través de sus contenidos y los textos utilizados durante su paso por el sistema educativo. Ambas fuente de información buscan generar un modelo social que adormezca el sentido crítico y que las luces de los intereses económicos de las grandes empresas prevalezcan sobre las sombras de la desigualdad provocada por esas la acumulación constante de riqueza en un pequeño grupo de personas.
En esta nueva colaboración con Radio Gramsci con David Serquera, nos planteamos cómo es posible que
el Secretario General de la OCDE que no hace mucho tiempo era partidario de la contención salarial para mejorar los costes laborales unitarios; ahora considere que la fractura de desigualdad generada durante la actual crisis económica entre las clases privilegiadas y las más empobrecidas puede ser considerada como un obstáculo que impida una futura recuperación económica.
Si bien Gurría ahora considera que las medidas de austeridad han sido excesivas, y achaca parte del problema a las mismas y por lo tanto lo considera como una consecuencia más de la crisis económica, desde nuestro punto de vista, esta visión es interesada, que oculta otra realidad de carácter más global y permanente en el tiempo.
Cuando nos referimos a que el cambio de opinión de la OCDE sobre las medidas de austeridad es interesada, nos referimos a que en realidad lo que busca en simplemente una suave mejora del consumo interno con el fin de usar esta mejoría de la economía real como muro de primera contención frente a la próxima vuelta de tuerca de la crisis económica generada por el estallido de la burbuja de la deuda soberana y por un segundo factor que se detectó en la crisis de 1929, se repitió en 2007 y apunta de nuevo a ser el factor esencial que desencadene un nuevo hundimiento de la economía mundial y que son el trasvase de los beneficios de la economía real a la inversión financiera que busca retornos a corto plazo, con amortizaciones rápidas.
Este trasvase de recursos de la economía real, a la economía financiera nos permite prever una nueva crisis cuando dichos benéficos financieros superen el 23,5%.
No es necesario buscar ejemplos en el 2007 o en 1929, los tenemos muy recientes. El primero de ellos son los beneficios anunciados por las empresas españolas que superaran los 43.000 millones de euros, cifra no alcanzada desde 2009.
El segundo, es el anuncio del Presidente Rajoy sobre el final de la crisis a nivel macroeconómico.
En definitiva, se busca que nuevamente la ciudadanía, soporte y socialice las nuevas pérdidas, evitando que los grandes patrimonios se ven afectados, ya que estos se verían afectados si no se generaran el muro de la ciudadanía y el del Estado.
Teniendo en cuenta lo descrito anteriormente, ¿cómo es posible seguir justificando el “trickle-down effect” o el efecto goteo?
Esta teoría mantiene que la estimulación de las grandes empresas y patrimonios mediante la reducción de impuestos y de todo tipo de ventajas empresariales termina generando un goteo hacía abajo que permite que la ciudadanía de manera progresiva se beneficie de esas mejoras de los grandes patrimonios.
Este concepto que no se explica de manera abierta, subyace en frases que hemos oído como: ”los efectos de las mejoras macroeconómicas tardaran tiempo en reflejarse a nivel de calle”. Y justificaciones similares a la anterior.
La realidad es, que estimular a las grandes compañías con el fin de mejorar las cifras macro, no llevan ningún sitio, ni cumplen con el objetiva de generar riqueza a la población en su conjunto.
Para comprender la ineficacia de estas medidas, no es necesario acudir a grandes estudios generados por Universidades de prestigio; tan sólo con ver los dos ejemplos actuales que voy aponer creo que será suficiente para una mejor comprensión de la falsedad del concepto el “trickle-down effect” o el efecto goteo.
El primero son los datos generados por el INE sobre “la Tasa de Pobreza o Exclusión Social en España”. Estos datos nos permiten ver la evolución de dicha tasa desde el 2004 al 2012, último dato, lo que supone una visión pre-crisis y postcrisis.
Total (2012) 27,4 26,8 26,0 23,8 23,5 22,5 23,1 23,6 (2004) 25,4
Si nos fijamos con detenimiento, la tasa de exclusión social es constante y tan sólo existe una diferencia entre el punto más alto y el más bajo de un 3,5%, lo que nos indica que en los momentos álgidos del crecimiento económico en España, no había una reducción substancial de la “la Tasa de Pobreza o Exclusión Social” reduciéndose tan sólo entorno a un 1%, mientras que durante la crisis aumentó un 3,5%.
Como se puede comprobar, no existe correlación entre la supuesta época de crecimiento y la de crisis en cuanto a la mejora de las clases más desfavorecidas.
Segundo ejemplo, las grandes empresas españolas han obtenidos unos beneficios superiores a 43.000 millones de euros, los más altos desde 2009, en cambio, el paro y la precariedad en trabajo sigue siendo la nota predominante en el panorama laboral.
Al mismo tiempo, más de cinco millones y medios de trabajadores gana 645 euros, el salario mínimo interprofesional que no les permite vivir dignamente.
Por lo tanto, ¿cómo se puede ser tan cínico para afirmar que las mejoras a nivel macro pueden beneficiar a una población que sobrevive con salarios de miseria o subsidios de 450 euros?
Creo que lo anteriormente expuesto debería llevarnos a reflexionar de manera más profunda sobre la realidad que nos quieren hacer percibir y la auténtica realidad con la que tenemos que convivir día a día.
Como complemento a lo dicho anteriormente os dejo un vídeo sobre la percepción del reparto de la riqueza que tiene los ciudadanos norteamericanos. El vídeo esta subtitulado al español
Se que me he extendido demasiado sobre el primer asunto que tratamos en el programa, pero no quiero por ello dejar de hablar de manera rápida como son las nuevas políticas geoestratégicas emprendidas por los Estados Unidos que buscan mantener su primera posición como líder económico mundial actualizando la política de bloques de la guerra fría, aunque en este caso no utilizando razones ideológicas, sino meramente comerciales.
Esta nueva política tendría sus primeras acciones en las sanciones de la Unión Europea a Rusia por el conflicto en Ucrania y la negociación de Tratados de Libre Comercio que excluyan o sometan a las economías emergentes como Rusia, India, Brasil, Sudáfrica o China.
Espero que disfrutéis del programa y que aporte algún elemento crítico a la discusión sobre los nuevos modelos socioeconómicos que deberíamos implementar en un futuro cercano para poder generar una auténtica democracia.